sábado, 13 de febrero de 2010
Un dimanche de février
Mi sátiro rodapié
malhumorado y dulce
tan de domingo de madrugada
Sigo sublime con interrupción, como repetía Umbral
Entonces no sé
¿Sería mucho decir que te quiero
petalizado en mis ojeras de vitró azul
perfumadas de resaca?
Es posible que cuando me llames
vayamos a las cosas
a qué hora y dónde
la cápsula, el oro verde, el pecado
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Sublimes sin interrupción son estos textos que traes. Baudeliere sería feliz, no hay duda. Masquemos.
ResponderEliminarYo quisiera ser petalizado, sin lugar a dudas.
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